No solamente protegemos tu boca de un trauma; además, identificamos situaciones de salud oral que producen disminución en tu rendimiento deportivo, fatiga muscular, contracción, dolor y dificultad en el movimiento.

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Es importante que deportistas, entrenadores y equipo médico-técnico sepan que un foco infeccioso en boca, un mal contacto dental, una mala mordida, presencia de metales (amalgamas, oro y otros), caries, inflamación de encías,  deben ser tenidos en cuenta si el deportista baja su rendimiento cuando aparentemente todo debería marchar bien.  

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Colocar correctamente la mandíbula con un buen protector bucal o con una placa de neuroposturolgia,  genera mayor potencia en tus músculos, aumenta la velocidad y disminuye el cortisol.